Autoridades de Estados Unidos advirtieron recientemente sobre bacterias peligrosas en las aguas y ciertos mariscos detectados en New York y Connecticut.
De acuerdo con comunicaciones de los respectivos Departamentos de Salud en Connecticut y Nueva York, al menos tres personas han muerto por infección de estas bacterias.
Según reflejan los informes, se trata de un microorganismo raro, conocido como Vibrio vulnificus, que puede encontrarse en aguas cálidas y salobres y en mariscos como las ostras crudas.
La bacteria procede de la misma familia que el Vibrio cholerae, que produce el cólera, aunque su infección puede provocar otros síntomas.
Entre los más síntomas destacables, explican los CDC, se encuentran la fiebre, la diarrea, vómitos y en casos graves abscesos, úlceras y heridas en la piel. Ciertas personas vulnerables con sistemas inmunológicos deprimidos pueden sufrir septicemia y morir producto de la vibriosis.
Los casos más recientes de muertes por ese motivo ocurrieron a finales de julio, relatan las autoridades, luego de que dos personas nadaran en Long Island Sound, un grupo de islas ubicadas entre Connecticut y Nueva York.
El Departamento de Salud Pública de Connecticut indicó que ambas personas, de entre 60 y 80 años, contrajeron la infección y murieron por complicaciones de la enfermedad.
Posteriormente una tercera, también anciana, se reportó como infectada tras consumir ostras contaminadas en un local fuera del estado.
La tercera muerte ocurrió propiamente en Nueva York, según indicó la gobernadora del Estado, Kathy Hochul, quien alertó que “si bien es rara, la bacteria Vibrio desafortunadamente ha llegado a la región y puede ser extremadamente peligrosa”.
Hochul solicitó a los residentes mantener precauciones a la hora de nadar en aguas salobres y tener cuidado al consumir mariscos crudos.
Por su parte, las autoridades de Connecticut indicaron que se reforzarán las medidas de control sobre la pesca de ostras en las aguas estatales, sobre todo las relacionadas con la congelación de los mariscos por tres horas tras la captura a temperatura por debajo de los 50 grados Fahrenheit.
En ambos estados se advirtió que las personas con heridas abiertas recientes, como las realizadas al colocar piercings o tatuajes, deben mantenerse fuera de las aguas donde habita la bacteria o evitar que la piel entre en contacto con esta.
Entre las precauciones más comunes se encuentra la de cubrir las heridas con vendajes a prueba de agua y comer ostras crudas solo de vendedores certificados por los departamentos de sanidad.
Los CDC indican que ante síntomas diarreicos o infecciones en la piel las personas deben acudir de inmediato al médico para evitar complicaciones por la vibriosis.
Anualmente, la bacteria provoca unas 100 muertes en todo Estados Unidos y los centros médicos del país reciben hasta 80.000 casos de la infección.