Autoridades de Estados Unidos detuvieron varios grupos de migrantes en la última semana de julio, tanto en la frontera terrestre al sur como en la marítima.
El 21 de julio, la Guardia Costera detuvo y transfirió a otra jurisdicción a varios migrantes procedentes de China.
Según la agencia, un total de 6 personas chinas fueron transferidas a la Real Fuerza de Defensa de Bahamas luego de que el bote donde viajaban fuera interceptado por intento ilegal de entrada al país.
En la tercera semana de julio, además, agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en el Sector de El Paso realizaron múltiples intercepciones de migrantes.
Durante ese periodo, los oficiales detuvieron a más de 145 personas extranjeras que fueron introducidas ilegalmente al país en 24 intentos de tráfico humano.
Entre los más destacables, señaló la agencia, se encuentra el intento frustrado durante el 9 de julio, cuando 12 migrantes intentaban ocultarse en los drenajes de El Paso.
Los agentes detectaron la actividad inusual cerca de la alcantarilla en Modesto Park, y al inspeccionarla encontraron a varias personas que trataban de evadir la detección.
El grupo, que estaba compuesto por tres menores procedentes de México que viajaban solos junto a varios adultos de esa nacionalidad y de Guatemala, recibió atención médica y fue procesado para su deportación.
Una operación similar fue llevada a cabo por agentes de la Estación de El Paso y el Departamento de Seguridad Pública de Texas, cuando un vehículo deportivo fue detenido en las cercanías de la Interestatal 10 por posible intento de tráfico de migrantes.
Al detener el automóvil cerca de una gasolinera local, los oficiales hallaron que estaba ocupado por 12 migrantes procedentes de Guatemala, El Salvador y México, incluido un menor guatemalteco no acompañado.
Las 12 personas fueron procesadas bajo el Título 8 y deportadas una vez se comprobó que se encontraban en buen estado de salud.
Según la CBP, otros 52 migrantes fueron detenidos en seis escondites descubiertos a lo largo del sector de El Paso, el 10 de julio.
En esa fecha, los oficiales de la CBP en la zona recibieron información local desde la Estación de Santa Teresa sobre un posible escondite al oeste de la ciudad.
Al llegar, los agentes confirmaron que en efecto se trataba de un escondite y procedieron a entrar, encontrando en el proceso a 30 migrantes de Honduras, México y Guatemala (incluido 1 menor).
Adicionalmente, entre el 13 y el 15 de julio la agencia realizó tres intercepciones de droga en la zona, pues según el jefe de Sector de El paso Anthony Good, “no dejaremos de combatir a los esfuerzos de estas organizaciones criminales de tráfico para hacer peligrar a nuestras comunidades”.
Así, el 13 de julio los oficiales de Alamogordo detuvieron un sedán de color negro que, tras ser inspeccionado por perros y métodos no intrusivos, resultó sospechoso. Tras revisarlo, los agentes encontraron 2 kilos de cocaína oculta debajo del suelo del vehículo en la parte del pasajero.
En la propia estación de Alamogordo, otro vehículo con droga fue interceptado mientras atravesaba el punto de control en la Autopista 54.
La inspección canina reveló que en la parte trasera del automóvil se ocultaban 3 paquetes de 12 libras de una sustancia blanca que resultó ser cocaína.
Por su parte, los agentes de la estación de Lordsburg detuvieron el día 15 a un sedán negro que transportaba una caja con narcóticos.
Durante la revisión los agentes detectaron la caja y al abrirla comprobaron que se trataba de unas 31 píldoras ilegales de fentanilo.