El presidente Joe Biden anunció el 27 de julio un grupo de medidas para proteger a la población del calor extremo que afecta a todo el sur de Estados Unidos.
En una conferencia de prensa sostenida en la Casa Blanca, el mandatario refirió que las altas temperaturas son la causa número 1 de muertes por eventos climatológicos en el país y aseguró que tomaría acciones para proteger a los trabajadores y las comunidades afectadas por la ola de calor.
De acuerdo con el presidente, anualmente mueren cerca de 600 personas por el calor, una cifra muy superior a la que provocan huracanes, nevadas y tornados.
Biden explicó que con efecto inmediato el Departamento de Trabajo (DOL) reforzará sus legislaciones respecto a la seguridad laboral y aumentará las inspecciones en centros laborales donde se han recibido más reportes de afectaciones por calor entre los trabajadores.
“No creo que nadie pueda negar ya el impacto del cambio climático. Debemos proteger a los trabajadores de las condiciones peligrosas que este ha provocado y así lo haremos”, afirmó además el presidente en su declaración.
De igual manera, Julie Su, secretaria del DOL, se encargará de proponer y presentar un sistema de alerta de riesgos que contemple los protocolos a seguir por los empleadores para proteger la salud y los derechos de los trabajadores.
Esto incluye trabajar con la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA) para introducir normas que protejan a los empleados de posibles represalias cuando se presenten quejas por incumplimiento de las acciones indicadas por la administración.
La OSHA deberá además participar en las inspecciones de los centros con mayores riesgos, como las zonas de construcción y las granjas agrícolas del sur de Estados Unidos.
Por otro lado, Biden anunció un grupo de inversiones de varias agencias federales para mejorar la infraestructura de protección contra las altas temperaturas a lo largo del país.
En California, Colorado y Washington, por ejemplo, se destinarán $152 millones para la construcción de nuevos almacenes de agua en comunidades proclives a la sequía.
Asimismo, el Servicio Meteorológico Nacional recibirá fondos por 7.000 millones de dólares para modernizar sus equipamientos y mejorar las predicciones de clima severo.
Las medidas de Biden llegan en medio de altas temperaturas que han llegado a alcanzar más de 110 grados en ciudades como Phoenix, Arizona.
Durante su mandato, además, el presidente ha presionado para tomar acciones de control contra el cambio climático y el clima severo que desde finales de 2022 ha afectado con sequías, tormentas, nevadas, tornados y olas de calor a gran parte de Estados Unidos.